Salvia
Es una planta cuyos beneficios medicinales abundan, aunque existen múltiples especies de salvia que son utilizadas alrededor del mundo por sus propiedades benéficas, una de ellas es la salvia officinalis, caracterizada por sus flores moradas y su característico aroma.
Desde la antigüedad ha sido utilizada como anestésico, diurético, cicatrizante y anti hemorrágico, e incluso el propio emperador Carlomagno llegó a promover su cultivo masivo y durante la edad media se le consideró como una “salvadora” (de ahí su nombre).
Esta popularidad dio origen a una multitud de usos para esta planta, entre ellos sazonar carnes, aumentar la fertilidad femenina, aliviar los dolores de la menopausia, aliviar la gingivitis y la faringitis, tratar heridas y úlceras, tratar la inflamación y los problemas estomacales, controlar la glucosa, e incluso mejorar el estado de ánimo.
Asimismo, es idónea para aliviar la acidez estomacal, la hinchazón abdominal, las flatulencias, los vómitos, los dolores estomacales de la gastritis o hernias
La salvia crece en lugares soleados y suelos húmedos, y su siembra de asiento puede hacerse entre abril y septiembre.